lunes, 30 de mayo de 2011

Piso 1

Tal vez en el otro mundo vivo en coma, inconsciente.

¿Serán reales el despertador de la mañana, el pasmo inexplicable que me entume las puntas de los dedos,
el barullo lejano que se mezcla en un insecto acústico y me trepa por las sienes?

¿O será un sueño de mi mente agonizante encarcelada por el cuerpo que yace en una cama, en un hospital, en un país, en un mundo donde sólo despierto cuando en éste duermo?

¿Y si al dormir no sueño, sino recuerdo?¿Si en el otro mundo también vivió aquel maestro siniestro, aquella casa sin barrio -como flotante-, aquella amante inasequible?

¿Y si la lógica fuera una ilusión y fuera posible caminar sin tocar el piso, tocar las estrellas con el índice, pedir fuego en un bar?

¿Y si mañana despierto y cuento mi vida como un sueño de lo más extraño?